Además del comercial, las colaboraciones crean conexiones emocionales, agregan valor cultural y ofrecen experiencias únicas
En el mundo de la belleza, donde las tendencias cambian tan rápido como las estaciones, las marcas buscan constantemente formas innovadoras de destacar y crear conexiones duraderas con los consumidores. Una estrategia que ha ganado una fortaleza significativa en los últimos años es la licencia. Al asociarse con personalidades bien conocidas, personajes icónicos o incluso otras marcas, las compañías de belleza están tejiendo una red de encantamiento en sus productos, convirtiendo las rutinas diarias en experiencias mágicas. Pero, ¿cómo exactamente las marcas de belleza aprovechan las licencias para generar fascinación y atraer a los consumidores, además del atractivo comercial?
El poder de la narrativa a través de la licencia
En esencia, la licencia se trata de contar historias. Permite que las marcas de belleza exploten las narrativas existentes en las que los consumidores ya aman y confían. Ya sea una colaboración con un querido personaje, una asociación con una casa de moda de lujo o una conexión con un programa de televisión popular, la licencia brinda a las marcas la oportunidad de infundir sus productos con nostalgia, fantasía o aspiración.
Fenzza, por ejemplo, se presentó en Abrin 2025 – Evento de juguete principal de América Latina, su estrategia para obtener nuevas audiencias a través de asociaciones de licencias. «Estos lanzamientos especiales no solo venden cosméticos, venden un sueño. Moana, que es parte de nuestra asociación con Disney, es un personaje que simboliza el coraje, la independencia y la conexión con la naturaleza. Estos productos pueden ayudar a las niñas a sentirse más seguras e inspiradas para cuidarse naturalmente. Esta conexión emocional es lo que transforma a los compradores casuales en los fanáticos de los leyales», explica Rena Canoni, CEO DA Fenzz.
Creando exclusividad
La licencia también permite que las marcas de belleza creen un sentido de exclusividad y urgencia. Las colecciones de edición limitada, generalmente vinculadas a una licencia específica, generan zumbido y entusiasmo. «Cuando los consumidores saben que un producto está disponible solo por poco tiempo o en cantidades limitadas, es más probable que actúen rápidamente para garantizarlo», dice el ejecutivo.
Construir conexiones emocionales a través de valores compartidos
En el escenario de belleza actual, los consumidores se sienten cada vez más atraídos por las marcas que se alinean con sus valores. La licencia puede ser una herramienta poderosa para comunicarlas, ya sea relacionada con principios como la sostenibilidad, la inclusión, la responsabilidad social o simplemente cómo los personajes se adhieren al concepto de belleza y cuidado personal.
En el caso de la línea Fenzza inspirada en la animación Moana 2, de los Estudios de Animación de Walt Disney, refuerza el compromiso de la marca con los cosméticos asequibles. «Nuestra idea era reunir los conceptos de la historia contados en Moana con nuestra propia cosmovisión y crear una línea especial en todos los sentidos», explica Renata.
El futuro de la licencia en belleza
A medida que la industria de la belleza continúa creciendo y evolucionando, la licencia sin duda juega un papel aún mayor en cómo las marcas se deleitan y atraen a los consumidores. Con la aparición de plataformas digitales y redes sociales, las posibilidades de colaboraciones creativas son infinitas.
Renata cree que la licencia es más que una táctica de marketing. «Es una forma para que las marcas de belleza creen conexiones significativas y emocionales con los consumidores. Cuando exploramos las historias amadas, ampliamos su alcance y alineamos los valores compartidos, transformando nuestros productos en algo verdaderamente mágico. En un mundo donde los consumidores buscan nuevas formas de expresarse, las licencias se revelan a sí mismos como una herramienta poderosa para que las marcas de belleza sigan siendo relevantes pero irresistibles», concluye.